martes, 25 de octubre de 2011

Baloo.

Me parece increíble que la última entrada sea del 27 de mayo. Ha llovido tanto desde entonces que ahora mismo no sabría por dónde empezar. En resumidas cuentas podría decir que terminé el erasmus, terminé la carrera y ahora estoy metida de lleno en otra aventura y en otra ciudad. Pero como resumir no era la tónica de este blog, haré un gran ejercicio de memoria para intentar relatar los últimos días de mi estancia en Florencia. 

Después de los últimos viajes, seguía acudiendo al “Baloo” a realizar las prácticas. Y por las tardes me encerraba en la habitación a leer ya que para mis exámenes de junio me habían mandado entre todos los profesores cerca de dos mil hojas en italiano. Como siempre hago en estos casos, me dividí la tarea para poder acabarla a tiempo, pero el agobio pudo más y terminé en mucho menos de lo que me esperaba, aunque para ello tuve que sacrificar ciertos viajes o ciertas quedadas. Pero está claro que en una situación así te decantas por lo que más te conviene.

Los días fueron pasando, seguro que con alguna anécdota que ahora, por desgracia, se ha perdido en el camino. Así, llegamos al 13 de mayo. El día en el que Sandra y yo terminamos las prácticas. Era un día alegre pero a la vez amargo. Les llevamos una “torta” a cada grupo que los niños disfrutaron sin entender muy bien a qué correspondía dicho detalle. Normalmente la comían cuando era el cumple de algún otro niño, pero ese día no. Simplemente era el modo de agradecer tanto a los pequeños como a los mayores, el cariño con el que nos trataron y los buenos ratos que nos hicieron vivir.

Dicen, que en magisterio, cuando haces las prácticas, solo hay dos opciones: o terminas la carrera del tirón porque es algo que te encanta y has corroborado que hiciste bien años atrás eligiéndola, o directamente no sabes dónde meterte. En mi caso, fue lo primero aunque en ese momento no lo sabía. Solo supe que sí. “Hiciste bien en cambiarte.” Y agradeces que tus padres no te dejaran perder un año, que aunque para ti fuera duro al principio, más de lo que debería haber sido, nada de lo que estás viviendo en ese momento hubiera pasado si ellos se hubieran desentendido y me hubieran dejado hacer lo que en ese momento quería, que era huir y no enfrentarme a algo que en esa época veía terrible. Y sí, es cierto que me perdí muchas cosas, que mi vida universitaria no ha sido como la de la mayoría, o que podría haber estado mejor, pero lo que realmente cuenta a día de hoy, es que con mis más y con mis menos, terminé mi carrera, y no solo eso, sino que junto al título me llevo una experiencia inolvidable que bien es cierto otros universitarios no tendrán. En definitiva, no tengo derecho a quejarme. Aunque bueno, eso ya lo sabíamos con solo leer el título del blog.

Volviendo al 13 de Mayo, ahora ya puedo asegurar que fue el último día que vería a Martino, un renacuajo que con apenas dos años cantaba el himno de Italia como podía. Una personita chiquitita por fuera, pero con un gran corazón que daba todo el amor y cariño posibles a sus compañeros y maestras. Pero sobre todo, siempre le recordaré por aquélla simpática manera que tenía para manifestar su felicidad. Daba botes, primero levantaba la pierna izquierda y luego la otra, así durante un rato, y todo ello decorado por una sonrisa  pícara que cuanto menos, te sacaba otra a ti. También sería la última vez que Lorenzo, uno de los pequeños, me alegraría la mañana al darme un abrazo de buenos días. O la última vez que nos reiríamos al mirar a Marlene, una niña francesa con los pelos muy rizados, que no hablaba ni papa de italiano. Las frases que más sonaban a su alrededor eran “oh la la” y “la pupé”. Por otro lado, la revoltosa de la clase, Tessa, no se me tiraría encima más para que la levantara por los aires ya que pensaba menos que una pluma. Así podría pasarme el blog entero. Cada niño era especial y eso se ve reflejado en que hoy, a 25 de octubre, todavía me acuerdo de ellos como si fuera ayer. Pero al fin y al cabo, todo en la vida tiene un final, y este fue el de mis prácticas.


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